EROTISMO @N LINE : If you are not in, you are out!!
El desarrollo de las nuevas tecnologías supuso la aparición de nuevas formas de comunicarse. Al hacerse más fácil la comunicación se hace también más fácil crear vínculos personales con los demás utilizando el erotismo ya no solo a través de gestos, miradas y sonrisas, sino a través de la palabra tanto escrita como oral.
El teléfono utiliza la voz como elemento de comunicación humana en detrimento de la imagen. Se ha utilizado como forma de sugestión erótica, a través de la voz podemos llegar a excitarnos, sin necesidad de que sea una voz especialmente bonita, basta con que sea erótica y sensual.
Las cartas han sido también una forma de conversación entre personas que se encontraban lejos, existe una larga tradición de amistades por correspondencia. Ya desde la primera Guerra Mundial habían asociaciones de “pen-friends” (amigos por correspondencia) que ponían en contacto a mujeres jóvenes solteras con soldados que estaban en la guerra. Estas cartas de jóvenes desconocidas subían su ánimo y aunque algunos nunca conocieron a sus destinatarias, otros se casaron con ellas al volver de la guerra. El coqueteo a través de la palabra ya era utilizado en el S.XVIII por las clases altas. Esto me lleva a pensar… ¿no habremos retrocedido en las armas de seducción y coqueteo al regresar a la escritura? Mañana analizaré más a fondo la escritura erótica en forma de novelas y relatos. Hoy, quiero hablaros del eros electónico, es decir, sobre el erotismo en Internet.
Se dice que Internet es el origen de lo que Alvin Toffler ha llamado la “sociedad de la desmasificación” donde individuos de ciudades y países muy diferentes pueden interrelacionarse sin salir de casa. La creciente movilidad demográfica debido al trabajo favorece las relaciones a través de la red que son más estables, Internet dinamita la geografía. La principal característica de las relaciones cyber-espaciales es que los sujetos no se relacionan por la proximidad física sino por sus afinidades comunes y su vinculo virtual sustituye al personal.
La materia prima para que estas relaciones se desarrollen es la escritura, como dijo Freud “la palabra del ausente”. Esta escritura puede llegar a ser tan erótica y seductiva como un coqueteo en 3-D (cara a cara). Sin embargo, no nos enseña una parte importante de la comunicación, el campo semiótico. Para sustituir esta información que constituye en la vida en 3D la semiótica, se han inventado los emoticons ( emotions + icons: caracteres formados por signos de puntuación que representan estados de animo) todo este lenguaje virtual ha creado un sistema propio de netiquette (network + etiquette).
Las llamadas comunidades virtuales (chats, foros, email) se diferencian entre si por el tiempo de lectura de los mensajes intercambiados, de ellos sería el Chat (conversación en directo) la comunicación más parecida a una realizada en 3-D. Estas comunidades crean entre sus miembros una “proximidad virtual”. Pero puede que sus miembros nunca lleguen a conocerse por lo que podemos decir que son comunidades invisibles, donde se aprecia una segmentación de los individuos diferente a la de la vida en 3-D produciéndose una parcelización en tribus electrónicas diferenciadas por sus intereses comunes, gustos y aficiones. Se crean vínculos afectivos interpersonales de carácter transnacional.
Según los estudios realizados sobre relaciones en la red, lo normal es que haya una progresión en la intimidad de la pareja. Normalmente se empieza escribiendo sobre ideas generales y gustos personales, de ahí se pasa a informaciones más personales sobre uno mismo y después a hablar de sentimientos. Al igual que en la correspondencia, es en este momento cuando se suele enviar una fotografía para que el corresponsal lo vea, surge aquí el temor a ser defraudado o a defraudar. Podemos decir que en la comunicación interpersonal en la red la invisibilidad fisica entre los interlocutores aporta una ventaja y un inconveniente: la ventaja es que da a la persona un anonimato completo permitiendo una mayor franqueza o por el contrario una ocultación de defectos propios. El inconveniente es que la comunicación es incompleta, aunque puede no ser un inconveniente ya que no todos quieren culminar la relacion cibernautica en una relacion en 3-D.
La red consituye un paraíso lleno de funciones eróticas y afectivas interpersonales, para lo que el doctor Lars Ullerstam consideró “minorías eróticas” con sus gustos especializados y su derecho a satisfacerlos. Es decir, mucha gente conoce a través de la red a personas que estan dispuestas a compartir sus fantasías que en 3-D no habrían compartido tan fácilmente e intenta realizarlas en cierta forma, compartiéndolas con la otra persona e imaginando que está viviendo esa fantasía. Como dice Román Gubern en su libro “El eros electrónico” la red es un “receptáculo de fantasías eróticas sin cuento, el promiscuo ciberespacio prueba que el sexo no está entre las piernas, sino dentro de las cabezas”. La red nos permite un cambio de identidad, de sexo e incluso que mas de una persona se hagan pasar por uno solo.
La culminación de Internet en cuanto a comunicación es, hoy por hoy, la videoconferencia. Pareciera a primera vista un medio que casi reproduce todas las ventajas de la comunicación cara a cara, pero cuando hay un sentimiento amoroso, ver al ser amado y no poder tocarlo resulta, como dice Gubertn, “más ansiógeno que la comunicación telefónica”. Podríamos analizar otra clase de erotismo que surge con la posibilidad de que desconocidos nos vean. ¿Por qué excita tanto a las personas el hecho de sentirse observadas? No es algo nuevo, pero Internet nos permite ser observados por personas a miles de kilómetros de distancia, personas que nunca conoceremos. Aumenta a diario el numero de personas que hace grabaciones de si mismo/a en posturas eróticas y sugestivas, muchas de ellas en directo, para un público que desconoce, pero que sabe que observa cada uno de sus movimientos. El cyber-erotismo en todas sus formas (chats, foros, videoconferencias) esta muy relacionado con la masturbación.
La parte oscura de este cybersexo es que puede crear adicción, David L. Delmonico (profesor de Universidad) acaba de escribir un libro sobre esto, aunque todavía no tenemos la traducción al español, el titulo es: "In the Shadows of the Net: Breaking Free of Compulsive Online Sexual Behavior" y habla sobre la adicción que puede crear el cybersexo y los problemas que ocasiona en la vida en 3-D, aunque algunos sexólogos creen que no se puede considerar adictivo ya que técnicamente “no es real”.
Termino esta entrada con una frase de Ernst Dichter que para mi gusto, caracteriza todas las relaciones on line:
“El vidrio, que nos permite ver, pero no tocar, es el perfecto símbolo de la frustración”
¡Hasta mañana! 
- SUGESTIÓN ERÓTICA -
